“Pensar positivos alegra el vivir”, es la filosofía de vida que sigue Jefferson Alcántara, un joven de 15 años de edad que se hizo conocido en las redes sociales después de que un video suyo se hiciera viral, no solo por su demostrado talento para el baloncesto, sino también por el hecho de seguir adelante en el juego a pesar de tener una sola pierna.
El joven recuerda que el 26 de noviembre del 2016, cuando tenía 11 años, estaba cruzando la avenida y se paró en la recta.
Luego se encuentra semiconsciente y adolorido, pero sobre todo, sin poder sostenerse de pie a pesar de tres intentos por levantarse. Lo siguiente fue la noticia de que había perdido una pierna.
Aunque él en ese momento estaba feliz porque estaba vivo, según comenta, la comunidad estaba triste y enojada por presenciar cómo alguien por estar “borracho” dañó a este jovencito.
“Estuve cerca del accidente. Vi el estado de embriaguez que tenía el conductor. No se podía ni sostener. Se subió donde la gente se para para cruzar; quería irse, pero lo detuvimos hasta que la policía llegara”, testimonia Jochy Martínez.
Martínez, quien es árbitro de baloncesto profesional, manifiesta que lo considera un “muchacho excelente”; que todos allá lo quieren desde siempre por su disciplina y comportamiento.
“Si ese muchacho hubiese tenido sus dos piernas, sin duda alguna, fuera uno de los mejores baloncestistas de la comunidad”, señala.
El mayor deseo de Jefferson es que Dios le permita bienes para ayudar a su madre.
*Pasión por el baloncesto*
Desde antes del accidente jugaba baloncesto en la cancha de la Calle 3, de su sector, donde “si me dejan, la entro todas”, afirma sonriente.
Sin apariencia de caerse, cuando Jefferson está en el juego salta y se desliza entre los demás sin temores. Cuando está cansado, se apoya en su rodilla que espera prótesis y flexiona la pierna para descansarla. Para muchos jugadores de allá es inspirador “verlo en acción”.
Después de su rutina diaria de ir al centro de internet, calentar su comida e irse a la escuela Eugenio Deschamps, en la que cursa el tercer grado del nivel secundario (antes primero de bachillerato); va a la cancha a hacer lo que más le gusta. Allí realiza todas las maniobras del deporte sostenido en su única pierna, puesto que aún no obtiene una prótesis.
Resalta que no le es doloroso jugar en ese estado, pero sí le cansa mucho, porque tiene que mantener todo su peso sobre un solo lado. Eso le preocupa mucho a su madre.
El pasado martes tuvo una cita médica para evaluar si se debe operar y determinar otros asuntos para usar una pierna auxiliar.
*Condiciones de vida*
Alcántara vive en el Barrio Libertad con su madre, quien obtiene sus ingresos de su trabajo en la zona franca. Su vivienda es rentada.
Un espacio que, por su tamaño, los demás llaman “una habitación”.
Por fortuna, gracias a que recientemente muchos han visto su caso en redes y medios, se le ha ofrecido una casa con la condición de que logren conseguir el solar.
*Apoyo de la comunidad*
Aunque los comunitarios afirman que lo han apoyado desde siempre, es el mismo joven quien destaca todo lo solidarios que han sido para con él.
“Me instaron a que siguiera jugando. Me bendicen. Los amigos me tratan como igual, nunca como discapacitado”, sostiene.
Iriel López, jugador de baloncesto profesional, lo vio y se conmovió, “porque a pesar de su situación, él nunca se echó para atrás”.
Tejada y López exteriorizaron sus deseos a los fines de más personas se animen a ser parte de que la situación de Jefferson Alcántara mejore.
Resaltan que, además de su comportamiento, él tiene buenas calificaciones, un gran deseo por salir adelante y mucho talento para llegar a ser orgullo del deporte que ama.
SEPA MÁS
Su historia se hizo viral
Iniciativa.
El video que está en las redes lo grabó Nelson Tejada, quien trabaja en la escuela donbde estudia Alcántara.
Motivación.
Cuenta que hizo el audiovisual porque le sorprendió la forma en que ese chico juega con solo una pierna.
Joven ejemplar.
Además de su comportamiento, él tiene buenas calificaciones, un gran deseo por salir adelante y mucho talento.