No en Balde, a Alejandro lo tienen como diamante “marciano” en la corona: un talento escaso que puede contener con reciedumbre pretoriana y atacar con la fortaleza de un huracán. Su asistencia el domingo contra Real Sociedad no deja dudas que se trata de otro fenómeno en Barcelona.
Alejandro Balde Martínez, de madre dominicana, pero por cuya descendencia nativa patriarcal (africano) ostenta una condición atlética y talento espectaculares, es una fiera en cada flanco del juego.
Balde, quien a sus 18 años suma siete cotejos oficiales, irrumpe en un Barcelona obligado a tenerle entre sus más preciados, y por ello lo blinda con acero macizo: quien quiera su fichaje tendrá que pagar 500 millones de euros a la azulgrana.
Balde es una caja fuerte en cada balón, que combina con su inmensa cualidad de pasador, y como mayor muestra está el botón dominical. Es el dominicano más joven en conseguirlo.
El nacido en Barcelona, donde comenzó a jugar con ocho años, es un lateral con gran versatilidad de piernas: envió de zurdazo una exquisitez a Raphinha, que éste mandó a la red sin despeinarse en amistoso contra Inter Miami (MLS).
Como dato elocuente, Balde tiene de agente al muy reputado Jorge Mendes, quien igualmente representa nada más y menos que a Cristiano Ronaldo, Ansu Fati y José Mourinho.
No en Balde, Alejandro
El entrenador Xavi, con una excelente camada de promesas lista para el salto, fue imprecado en la jornada inicial de liga por dejar a Balde en el banco ante Rayo Vallecano, a pesar que venía de gran pretemporada. El domingo, el sensacional juvenil lo justificó con creces.
Balde Martínez comenzó a demostrar el porqué su alta valoración culé, cuando al primer balón que tocó dio una espectacular asistencia en centro que Robert Lewandowski convirtió a placer (min 1).
Si bien –por lo pronto- Balde sería sobretodo un espaldero de Alba (33 años), quien mandara precisamente a otro quisqueyano (Junior Firpo) fuera del Barca, la diferencia ahora estriba en tiempo transcurrido, edad del ibérico e irrupción del incipiente descendiente matriarcal.
Balde está tan cotizado, que sólo tres fichas tienen mayor valía en la catalana: el fenómeno Fati, Pedri, Ferrán Torres y Ronald Araújo, cuyas cláusulas de rescisión ascienden a la astronómica € 1000 millones. El Barcelona “lo vende” como intocable.
La de Alejandro supera otras baluartes promesas como Frenkie de Jong y Sergi Roberto, además de la perla Dest, blindados con 400 €M. Entre veintiocho jugadores de la plantilla completa, sólo otros nueve llegan a la cifra del descendiente materno.
Y el enorme plus que posee Balde viene por excepción: posición y tangible versatilidad (ataca), sólo comparable al mundialmente histórico Marcelo, brasileño de larguísima data en Real Madrid.
¿Jugaría con RD?
El polivalente representa a España desde la sub-16, pero “nunca es tarde…”, y República Dominicana aún está “en el globo”, a pesar que este descendiente (no hay información de la madre porque no frecuenta el país) tiene su enfoque a la Furia Roja.
Y la posibilidad de que Balde represente a la tricolor, incluso en el Mundial sub20, lo dictaría el cómo se mueva la Federación Dominicana.
Así, porque en su única visita al país en junio (traído por el “scout” (buscatalentos) Elimelec de los Santos, Alejandro derramó un Balde de esperanzas: “No cierro ninguna puerta…”, dijo a ESPN, mientras Dominicana enfrentaba a Guatemala en Liga de Naciones.
Lo más importante es que se sintió muy identificado en la geografía nacional (playas, paisajes), además de que le llama la atención el nivel creciente de la Selección: si lo saben buscar, podría ser amarrado con tiempo. “Me ha gustado mucho el país”.