Si los fantasmas de la corrupción y la impunidad recorrían sin obstáculos el país, viviendo sus beneficiarios del robo a los bienes públicos, sus tiempos de brillo y burlas lucen seriamente amenazados por la osadía de dos mujeres que, desde la torrecilla del Ministerio Público, están listas para procesarles y llevarles a prisión.
No habrá trampa ni privilegios y quien haya cometido corrupción ahora tendrá que rendir cuentas. Al menos, esto es lo que ha advertido la procuradora general de la República, Miriam Germán Brito. “Nadie estará exento”, dijo, y esto incluye hasta expresidentes, que pueden ser ser llamados ante la justicia si existiera algún indicio en contra.
Y la procuradora de Persecución de la Corrupción, Yeni Berenice Reynoso, tuvo el tono más enfático y contundente sobre esta determinación contra el flagelo: “Vamos con todo y por todos”.
Acusación sustentada
Miriam Germán Brito dijo que si hay hay una acusación bien sustentada se procederá no importa si en un caso se haya sido presidente de la República, porque el proceso “no libera a nadie de responder de sus hechos”.
Tras ser entrevista en el programa Despierta con CDN que se transmite por el canal 37, Germán Brito también dejó claro que todos los procesos se realizarán cumpliendo con el debido proceso y el respeto a las leyes.
Por otro lado, la Procuradora manifestó que halló un desarreglo de empleados a su llegada a la institución, gente nombrada sin funciones y exceso de personas donde no era necesario.
Expresó que eran personas, muchas todas, que venían de donde trabajaba el antiguo incumbente Jean Alain Rodríguez.
“Hemos encontrado un personal que no tenía función, no es que todo el que viniera del CEI-RD no tuviera función, algunos sí”, acotó Germán Brito.
Respeto al estado de derecho
Por su parte, la procuradora de Persecución de la Corrupción, Yeni Berenice Reynoso, asegura que la única restricción que tendrán por delante los funcionarios judiciales será “el respeto al estado de derecho”.
“Vamos con todo y por todos”, con estas seis palabras se refirió Yeni Berenice Reynoso a las investigaciones de casos de corrupción que están en su despacho, y adelantó que su única lealtad es con la Constitución.
“No quedará sin investigar ninguna denuncia que tenga que ver con la desaparición o sustracción de un peso del Estado”, advirtió Reynoso, durante una entrevista en el programa Despierta con CDN, en la que también participaron la procuadora Miriam Germán Brito y Wilson Camacho, procurador adjunto a cargo de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca).
Firmes y decididos
Manifestó la firmeza y determinación del ministerio público de que todos los expedientes de corrupción sean bien estudiados y sustentados, para que los procesos sean fuertes y tengan buenos resultados ante los jueces.
Berenice Reynoso insistió en que la única restricción que tendrán por delante los funcionarios judiciales que tendrán bajo su responsabilidad los casos de corrupción será el respeto al estado de derecho.
Afirma que nadie está liberado de responder por sus hechos, no importa si es funcionario o presidente actual o en el pasado.
“Lo que garantizamos es que a nadie se le va a atropellar”, agregó.
La entrada de Yeni
La procuradora Miriam Germán Brito designó el día 7 de este mes a Yeni Berenice Reynoso Gómez como directora general de Persecución, mientras el Consejo Superior del Ministerio Público puso bajo la responsabilidad del procurador adjunto, Wilson Camacho, la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca).
El Consejo aceptó la puesta a disposición del cargo de la magistrada Laura Guerrero Pelletier y colocó a Camacho en el Pepca en forma interina.
Germán Brito trasladó la sede de la unidad anticorrupción a la cuarta planta del edificio de la Procuraduría. Ese órgano dependiente funcionaba, en principio, con seis fiscales, pero ahora tiene un componente de 25.
Y será fortalecida con la contratación de expertos en diversas áreas, como de la contabilidad, la tecnología y finanzas, con el objetivo de reforzar las investigaciones y procesamiento de la criminalidad organizada, en especial de delitos como la corrupción y lavado de activos.
En el caso de la Dirección de Persecución, esta recibirá el reforzamiento de 15 fiscales que también podrán prestar asistencia a la Pepca cuando el nivel de las investigaciones así lo requieran.