Un joven de 22 años, jugador de baloncesto, fue encontrado muerto esta semana y se cree que, por error, una pandilla lo secuestró, quemó y mató.
Autoridades de Nueva York informaron este viernes, que el exjugador universitario de baloncesto Jesse Parrilla, de 22 años, fue encontrado asesinado con su amiga Nikki Huang en un automóvil incendiado en el Bronx, en la madrugada del lunes.
Investigaciones preliminares, indican que la pareja fue primero secuestrada, después ejecutada a tiros y finalmente se le prendió fuego al automóvil en el que estaban, dejándolos irreconocibles.
Exjugador de baloncesto no tenía antecedentes penales
Medios locales de Nueva York, reportaron que el asesinato de la pareja se habría suscitado luego de que Huang, quien presuntamente era cercana a los miembros de una pandilla, se quejó con sus amigos de que un grupo rival la había asaltado y le había robado su bolso.
El joven Parrilla no tenía ninguna afiliación pandillera,tampoco tenía antecedentes penales, según las autoridades.
El joven deportista había estudiado con Huang. Y se piensa, que el domingo, ella le pidió que la llevara en su auto a un lugar y por eso estaban juntos, para hacerle un favor.
Sin querer, el joven quedó atrapado en una pelea mortal que libran dos temerosas pandillas: Up the Hill y Down the Hill.
La joven, cuya familia es propietaria de un salón de manicuras y un restaurante en el Lower East Side, tenía amigos en la pandilla Up the Hill.
Las autoridades creen que lo mataron por error
“En este momento parece que estaba en el sitio equivocado, en el momento equivocado”, dijo un policía de Manhattan. “No tiene antecedentes penales. Parece que solo estaba pasando el rato con Nikki», aseguró.
La madre del exjugador de baloncesto, Michelle Morales, propietaria del automóvil en el que mataron a la pareja, dijo que su hijo conocía a Huang de la escuela secundaria.
“Era una persona de buen corazón que únicamente ayudaba a un amigo a dar un paseo”, dijo entre lágrimas. “No creo que él supiera nada. No tenía idea de lo que estaba pasando, porque nunca se pondría en una situación como esa”, concluyó la madre.