El servicio de electricidad es esencial para el desarrollo económico y social, sin embargo, hasta qué punto se puede estar cumpliendo en República Dominicana, donde las bases que dieron lugar a la firma del Pacto Eléctrico se han diluido.
Solo en el trimestre abril-junio de este año, el Protecom, un departamento habilitado por la Superintendencia de Electricidad (SIE), conforme a la Ley General de Electricidad, registra más 9,207 reclamaciones de usuarios que se quejan de sobrefacturación y otras variables a las que se suman los apagones que dan las Empresas Distribuidoras de Electricidad (EDES) a la población, sin que haya problemas de generación eléctrica.
De estas, 5,455 fueron “procedentes” y las EDES deben acreditar más de RD$8.4 millones a los usuarios. Como tampoco, se conoce de alguna explicación de los costos operativos de las EDES en detalles.
Si bien los precios de los derivados del petróleo están en alza, lo cierto es que la matriz de generación del país está siendo servida con un 45% a gas natural, 30% a carbón, y solo 9% con fuel oil 2 y 6.5% con fuel oil 6.7% con hidroeléctrica, 1% con biomasa, y 4% solar. Mientras tanto, hay muchos sectores quejándose de apagones, pese a que el sistema de generación disponía ayer de un suministro real de 3,798 megavatios.
El tema deberá llamar la atención de los firmantes del pacto, porque al parecer no será posible cumplir con el esquema de reducción de pérdidas, con la rehabilitación de redes, ni los costos operativos de las distribuidoras, que fueron los puntos principales como requisitos para la aplicación de la tarifa eléctrica trimestral, junto a nuevas inversiones.
Cumplimiento parcial
En el país, son múltiples los reclamos de la sociedad que logró aplicar el Pacto Eléctrico para que haga una revisión al compromiso del Convenio, debido a que se está aplicando de manera parcial en detrimento de los usuarios porque también contribuye con el alza inflacionaria que interanual pasa de 9% y quitando los factores exógenos de los combustibles también pasa de 7% a junio de este año.
El alza de precios está muy relacionada con los precios de combustibles porque se afecta la energía y el transporte.
Representantes del Gobierno, empresarios, partidos políticos, sindicatos y otros de sectores de la sociedad civil apelaron a una solución de un servicio que es esencial para el desarrollo. Tras varios años sin que fuera ejecutado el convenio fue firmado y se ha ido aplicando, pero esta vez son muchos los sectores (políticos y comerciales) los que están pidiendo una revisión.
El Consejo Económico y Social (CES) fue el escenario para su discusión, pero como es una ley el Congreso de la República debería volver sobre estos puntos, afirman expertos.
El convenio llama a reducir las pérdidas de las distribuidoras en 16.5% en 2022 y según expertos del sector estas promedian un 27% entre las tres, con un peor desempeño en Edeeste, que además de que opera la mayor concesión tiene más problemas con la rehabilitación de redes.
Otro mandato, además de aumentar las inversiones, analizar los estándares de operación, reducir los costos de operación de las EDES y cambiar los medidores a telemedidos. Estas últimas disposiciones paren haber caído al olvido, junto con la expansión de redes.
Tarifa de transición
En la página 28, del documento del Pacto Eléctrico, se indica que desde el 1 de julio de 2018 se aplicaría el ajuste tarifario trimestral.
Pero precisa que esta medida sería “sujeta en función a las variables en el precio .medio de compra, las variables de la tasa de cambio, la reducción de las pérdidas y la mejoría de la eficiencia, tomando en cuenta sus respectivas ponderaciones.
Para las EDES desarrollar sus estrategias en materia tarifaria deberán cumplir “estrictamente” con el programa de reducción de pérdidas y el cronograma de mejora de la gestión de las distribuidoras.