Punta Popy es, cuando de playas se trata, el Santo Grial encontrado de Las Terrenas.
Un triángulo ancho, ancho; de aguas claras y arenas amarillas, bajita y con –todavía- grandes manchas verdes que custodian su entrada.
La punta y sus laterales son la playa del pueblo, de las reuniones al aire libre, el sitio donde encuentras qué comer, qué beber y dónde tenderte sabiendo que estás a tres minutos del centro y custodiado por la anchura del espacio.
Y lo mejor, un espacio público y por tanto libre de tumbonas y otras infraestructuras que le roban magia al paisaje.
¿Además del baño?
Frente al Atlántico, al noroeste de Samaná, Punta Popy es perfecta para la práctica de kite y surf de remo (paddle surf). Las terrazas marinas también permiten hacer buceo deportivo.
Mejor si vas un día de semana, porque sentirás que el lugar es más grande y disponible para disfrutar.
Por estar enclavada en un destino turístico con muchas facilidades para el visitante, visitar Punta Popy puede ser el punto de partida para explorar muchos de los atractivos de Las Terrenas: galerías de arte, tiendas, mercadillos al aire libre y la hermana gemela de punta Popy, ubicada en su extremo oeste: Punta Bonita.
SI VAS. Se accede a la playa de Punta Popy por todo el borde costero que une las playas Ballenas y El portillo. O desde el centro del pueblo tomando directamente la carretera 27 de Febrero: la punta se encuentra a no más de 200 metros desde el pavimento.