Si bien es cierto que en Estados Unidos y en ppaíses de Europa ya han habilitado algunas plazas para presentaciones artísticas, en el caso de República Dominicana esa posibilidad se mantiene cerrada.
Sin embargo, el movimiento urbano entiende que es hora de que se puedan flexibilizar las medidas de cierre total para los shows y plantea que se podrían realizarse presentaciones horas antes del horario de toque de queda, con el control en el flujo de personas y estricto cumplimiento de un protocolo sanitario y distanciamiento de las mesas.
“Al agregarle dos horas a las nuevas medidas del confinamiento los urbanos locales bajo estricta medidas de seguridad pueden hacer fiestas quizás en el horario de 7 a 8 de la noche para un grupo determinado de persona al aire libre, donde no se vea nadie expuesto”, sugiere el Enano Entertaiment, realizador de eventos.
Estos largos meses de pandemia han afectado la industria musical y, en particular, los urbanos se han visto forzados a ingeniárselas para sobrevivir porque no todos pudieron “guardar pan para mayo”.
Quienes viven de las actividades musicales están con el grito al cielo. Así mismo como las pequeñas, medianas y grandes empresas, los intérpretes urbanos están buscando la manera de abrir el área del entretenimiento local.
“Quizás muchos dirán que esta idea está fuera de contexto, pero hay que pensar que esta es una plaza que aporta significativamente a la economía del país y que miles de personas dependemos de ella” explica David Paraíso (Promotor).
OPINIÓN
Comentarios.
Algunas actividades se están desarrollando, pero de manera virtual, lo cual denuncian ambos entrevistados que “eso solo beneficia a un grupito”. Según ellos, quienes viven de los negocios en los barrios no tienen esa plataforma de artistas ya establecidos por años con empresas “y son más los que dependen del trabajo en la calle que los que hacen concierto virtuales por paga”.