De buen humor encontró la muerte a Charlie, el popular tiktoker español que en redes sociales le dio buena cara a la vida y contaba día a día sobre el cáncer que padecía. Tenía 20 años de edad.
Carlos Sarriá, su nombre real, creó una cuenta en TikTok, padecía del sarcoma de Ewing, un tipo raro de cáncer que se produce en los huesos y que le fue diagnosticado en 2016, cuando también le detectaron un tumor en la cabeza.
Sus seguidores se enteraron este lunes cuando en sus redes aparecía el tema «Un verano sin ti», que interpreta el puertorriqueño Bad Bunny, junto a una imagen de Charlie, despidiéndose de sus millones de seguidores,
“Nadie estaba listo para una despedida”, canta Bunny sobre una serie de vídeos y fotografías en las redes del joven fallecido el pasado fin de semana, pero dado a conocer el lunes por su familia.
“Gracias por todo, me hicieron muy feliz”, resalta en su último mensaje ante su legión de admiradores.
“Adiós, hijos de puta, nos vemos en la otra vida (Charlie, 2002-2022)”, se lee en el Instagram de Charile, quien se definía como “un chaval normal, pero con cáncer” o “el del cáncer que hace cosas”.
A través de un lenguaje descarado, la ironía y el humor, el tiktoker español narraba su día a día con la quimio y la morfina y sus entradas y salidas del hospital.
Charlie sumaba 3.2 millones de seguidores en TikTok, 748,000 en Instagram y 81,900 en Twitter, redes que se han llenado de mensajes por el joven, entre ellos uno desgarrador de su novia, también influencer.
Nerea, su pareja, escribió un doloroso adiós: «Esta fue nuestra primera foto. Me iba a trabajar y antes de que se cerraran las puertas del tren pensé ¡madre mía este chico no me va a volver a escribir en la vida! Era la primera vez que quedábamos y esa noche ya dormimos juntos…no paso nada que os conozco y os gusta mucho pensar mal. Se cerraron las puertas y ya tenía un mensaje. Respiré. Madre mía es que estaba pilladísima, pero no lo quería admitir. Yo siempre yendo de chica dura. En menos de un mes ya estábamos saliendo y cuando hicimos un mes de relación ya le estaba presentando a mi familia. ¿Fuimos muy rápido? Tal vez. Con Carlos todo era tan fácil que ni lo pensaba, simplemente me dejaba llevar porque, aunque éramos totalmente desconocidos, sentía que llevaba toda la vida con él. Los dos nos sentíamos así. Cuando no llevábamos ni 6 meses el cáncer atacó de nuevo, también la pandemia y la verdad es que fueron unos meses muy duros, ya que físicamente no podía apoyarle. Mucha gente me llama valiente por no haber huido y yo pienso “¿Esta gente nunca ha sabido lo que es amar?” Una pena».