El Gobierno de Bolivia ha considerado este jueves «irrelevante» que el expresidente Evo Morales se haya retractado ahora de la polémica propuesta que lanzó el domingo sobre la creación de «milicias armadas» en el país.
«Respecto a la retractación de Morales, en realidad eso ya es irrelevante», ha indicado la ministra de Exteriores boliviana, Karen Longaric. A su juicio, «él ha hecho conocer las intenciones que tiene con este país y el pueblo boliviano».
Asimismo, Longaric ha criticado que, desde las elecciones del 20 de octubre, raíz de la crisis política en la que está inmersa el país, Morales «siempre priorizará sus intereses ideológicos y compromisos internacionales con sus socios», según ha recogido la agencia de noticias boliviana ABI.
Morales habló de crear «milicias armadas» si regresa a Bolivia, de donde salió tras dimitir el 10 de noviembre por las «irregularidades» detectadas por la Organización de Estados Americanos (OEA) en las elecciones presidenciales celebradas en octubre.
El exmandatario argumentó que estas «milicias armadas» serían útiles para prevenir brotes de violencia como los vividos durante la crisis postelectoral. Según él, la Policía no actuó para defender a los bolivianos. Más de 30 personas murieron por enfrentamientos entre partidarios y detractores del líder indígena y con los uniformados.
Sin embargo, se ha retractado este jueves, al tiempo que ha expresado su compromiso con «la defensa de la vida y la paz».
«Hace unos días se hicieron públicas unas palabras mías sobre la conformación de milicias. Me retracto de ellas. Mi convicción más profunda siempre ha sido la defensa de la vida y de la paz», ha dicho en un comunicado difundido en Twitter.
Morales ha explicado que siente un «profundo dolor» por la situación en Bolivia, denunciando una «persecución sistemática» y la presencia de «grupos paramilitares que recorren las calles», así como «masacres».
En este contexto, ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional «para que haga todos los esfuerzos para garantizar el respeto a los Derechos Humanos». «No quiero que nada de lo que diga sea usado como un pretexto para perseguir y reprimir a mis hermanas y hermanos», ha añadido.
Además, ha querido expresar su convencimiento de que «la paz solo puede ser alcanzada a través de una democracia plena, restableciendo el Estado de Derecho, con pleno respeto a los Derechos Humanos, con justicia social y con la lucha contra todas las formas de racismo y discriminación, siempre en el marco de nuestra Constitución».