Cientos de haitianos realizaron este miércoles en Puerto Príncipe y en otras ciudades del país, variadas formas de protestas contra el aumento de la inseguridad y los secuestros en el país.
En Carrefour, al sur de la capital, centenares de personas salieron a las calles para denunciar el fenómeno del secuestro, que está creando una psicosis de miedo en todo el país.
Utilizando ramas de árboles y dirigidos por una carroza que reproducía canciones populares, los manifestantes abogaban por un clima de paz y exigían a las autoridades que asuman su responsabilidad.
Por otra parte, los estudiantes de la Universidad Estatal de Haití realizaron una manifestación al mediodía en el Champs de Marc para protestar contra la inseguridad.
Los estudiantes han pedido la cancelación de las festividades de carnaval de este año y han destruido infraestructura construida para la celebración de esa tradicional fiesta popular
Policías del Cuerpo de Intervención y de Mantenimiento del orden (CIMO, en francés) dispersaron a los manifestantes lanzándoles gas lacrimógeno
Además, equipados con piedras o trozos de hierro, otros cientos de estudiantes en varias partes del país convocados en las redes sociales por el movimiento «Vencer la Oscuridad» golpearon ollas y sartenes.
Este martes fueron liberados por sus captores cinco jóvenes cristianos protestantes miembros de la iglesia Le Phare de la Cité situada en Martissant 7, que habían sido secuestrados y mantenidos cautivos desde el sábado pasado.
La Asociación Nacional de Magistrados de Haití dijo este miércoles que observaba con dolor el dramático aumento del fenómeno de los secuestros en Haití, en particular en las zonas urbanas.
«En estos tiempos difíciles la población no soporta este flagelo que decapita y causa tristeza», dijo Jean Wilner Morin, presidente de esa entidad.
Morin pide a las autoridades que garantizan el orden público, a que hagan todo lo posible para devolver la paz y la tranquilidad a las familias para que puedan seguir llevando a cabo sus actividades con serenidad.
El fenómeno del secuestro para exigir rescate está creando un clima de temor en todo el país donde desde hace una semana se ha producido al menos un secuestro cada día. Las personas han reducido sus actividades y las calles empiezan a descongestionarse más temprano de lo acostumbrado.