La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH), con sede en Costa Rica, anunció este miércoles que como medida preventiva ante el coronavirus COVID-19 decidió suspender las audiencias programadas para la próxima semana.
«Atendiendo a las indicaciones del Gobierno de la República de Costa Rica, así como las de la Organización Mundial de la Salud, la CorteIDH considera oportuno evitar los viajes y traslados internacionales que requieren las próximas audiencias públicas», indicó la CorteIDH en un comunicado.
Las audiencias suspendidas son por demandas contra Venezuela y Bolivia, las cuales serán reprogramadas próximamente.
La primera audiencia suspendida es la del caso Olivares Muñoz contra Venezuela, prevista para el 16 de marzo.
El caso se refiere a la presunta ejecución extrajudicial de los presos Orlando Edgardo Olivares Muñoz, Joel Rinaldi Reyes Nava, Orangel José Figueroa, Héctor Javier Muñoz Valerio, Pedro Ramón López Chaurán, José Gregorio Bolívar Corro y Richard Alexis Núñez Palma, hechos ocurridos el 10 de noviembre de 2003.
Otra audiencia pospuesta es la del caso Flores Bedregal y otras contra Bolivia, que se iba a realizar el 18 de marzo.
Este caso trata sobre la presunta desaparición forzada del dirigente del Partido Obrero Revolucionario y diputado, Juan Carlos Flores Bedregal, en el marco del golpe de Estado de julio de 1980 por Fuerzas Militares.
También ha quedado suspendida la audiencia del 17 de marzo sobre una solicitud de opinión consultiva presentada por el Estado de Colombia sobre el alcance de las obligaciones internacionales en materia de protección de derechos humanos de un Estado miembro de la OEA que ha denunciado la Convención Americana.
La Corte Interamericana informó que se pondrá en contacto con las partes para informales de la medida y buscar una nueva fecha para las sesiones.
El Tribunal señaló que «reafirma su compromiso con el trabajo por la protección de los derechos humanos en el Continente, al tiempo que se suma a los esfuerzos internacionales para evitar la propagación del coronavirus».
En Costa Rica, donde se encuentra la sede del la CorteIDH, las autoridades han contabilizado hasta el momento 22 casos del COVID-19 y el Gobierno ha ordenado la suspensión de eventos masivos y realizar teletrabajo en la medida de lo posible, entre otras medidas.