El presidente Donald Trump pidió el domingo a los estadounidenses que dejen de acumular comestibles y otras provisiones, mientras que el principal experto en enfermedades infecciosas le solicitó a la nación que actúe con más urgencia para salvaguardar su salud mientras el coronavirus sigue expandiéndose en Estados Unidos.
El doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Enfermedades Alérgicas e Infecciosas, comentó que le gustaría ver la aplicación de medidas agresivas, como por ejemplo una cancelación de actividades no esenciales durante 14 días para ayudar a frenar la pandemia.
Después de hablar con ejecutivos de las principales cadenas de supermercados, Trump les aseguró a los estadounidenses que esas tiendas permanecerán abiertas y que la cadena de suministro sigue operando correctamente. En la misma conferencia de prensa en la Casa Blanca, el vicepresidente Mike Pence exhortó a los habitantes a comprar sólo los artículos que necesiten para la siguiente semana.
“No tienen que comprar tanto”, afirmó Trump. “Despreocúpense, sólo relájense”.
Por su parte, Fauci comentó que probablemente no sean necesarias a corto plazo las restricciones de viaje dentro del territorio nacional, incluyendo el estado de Washington, muy afectado por la enfermedad, y California.
Horas antes, Trump sostuvo una conferencia telefónica con ejecutivos de más de dos decenas de cadenas de tiendas y de suministro sobre su repuesta al brote del coronavirus. Las tiendas han reportado que los clientes están acudiendo a ellas para almacenar alimentos y otros artículos esenciales. Los consumidores han expresado su frustración de que algunos artículos _por ejemplo, el desinfectante para las manos y el papel de baño_ empiezan a escasear.
Durante la llamada, Trump expresó agradecimiento por su trabajo para asegurar que hubiera “constante disponibilidad” de alimentos de forma que los “estadounidenses sientan calma y seguridad cuando los anaqueles están abastecidos con los artículos que necesitan”, según Judd Deere, vocero de la Casa Blanca.
El gobierno de Trump dijo que millones de nuevos exámenes para detectar el coronavirus estarán disponibles en las próximas semanas, incluso pruebas que aceleran el procesamiento de las muestras, pero que exhorta a los estadounidenses a que procuren no solicitar ser analizados.
La doctora Deborah Birx, coordinadora de la respuesta de la Casa Blanca a la pandemia, dijo que los más vulnerables a la enfermedad respiratoria y los proveedores de atención médica que los atienden deberían tener prioridad.
“Les pedimos que les den prioridad”, dijo.
En muchas personas, el coronavirus sólo provoca síntomas moderados, como fiebre y tos. En algunos, en particular adultos mayores y personas con problemas de salud preexistentes, puede causar efectos más graves. Sin embargo, la gran mayoría de las personas enfermas de COVID-19 se recuperan.
El brote a nivel mundial ha infectado a más de 156.000 personas y dejado a más de 5.800 sin vida. La cifra de muertos en Estados Unidos ha superado los 50, mientras que el número de infecciones se acercó a las 3.000 en 49 estados.