Puerto Rico quedó ayer envuelto en polvo del Sahara, un evento que no sucedía con tal intensidad desde hace 50 años y que ha llevado a las autoridades a catalogar el aire de “muy insano” ya que las concentraciones de arena son “altas». A ello se une que las temperaturas alcanzan entre 37.7º y 41º celsius.
La capa de polvo es tan densa que ha afectado la visibilidad en muchas partes de la isla y en algunas zonas la densidad es tal que el sol se ve difuso, mientras en la capital es palpable la nube causada por el polvo.
La visibilidad, de acuerdo con el Servicio Nacional de Meteorología (SNM), es de ocho kilómetros en algunas partes, cerca de la mitad de lo normal, como el caso del aeropuerto internacional Luis Muñoz Marin, en las cercanías de San Juan.
Los expertos han advertido que además de la mascarilla para llevar a cabo las tareas diarias en los lugares públicos, en caso de salir al exterior se recomienda el uso de las mismas y de gafas o protectores para los ojos en caso de estar mucho tiempo al aire libre. Las personas mayores o con patologías de salud como asma o alergias no deberían estar fuera de sus casas tampoco, advierten expertos.
Varios países de la región caribeña comenzaron a verse afectados el domingo por una enorme nube de polvo del desierto del Sahara, lo que provocó que las autoridades advirtieran de los riesgos, en especial a personas con problemas respiratorios como asma.
La Oficina Meteorológica de Barbados emitió para una advertencia a la población por la esperada presencia del polvo del Sahara sobre la isla y parte del Caribe Oriental. Además, se emitió una advertencia específica para embarcaciones, que se produce cuando la visibilidad en el mar es menor a 5 kilómetros.