La comisión científica que asesora al Gobierno haitiano en el combate a la COVID-19 teme una nueva ola de contagios, en un momento en que el primer ministro, Joseph Jouthe, acaba de levantar el estado de emergencia.
El doctor Jean-Hugues Henrys, miembro de la comisión científica, dijo a Efe que se espera un rebrote debido a los festivales de vudú que se celebran desde hace varias semanas en varias ciudades, donde se han producido aglomeraciones, y por el total incumplimiento de las medidas de seguridad por parte de la población.
«Sí, en efecto, lo que ha ocurrido en estas actividades tendrá un impacto real en la evolución de la propagación del virus, asumimos que lo veremos en la segunda semana de agosto», dijo Henry en una entrevista a Efe.
Entre las ciudades que se han realizado festivales de vudú, con afluencia multitudinaria de personas, se encuentran Saut d’Eau, Plaine du Nord, Limonade y Camp Perrin.
Durante estos festivales, no se han respetado las medidas de seguridad, tales como el lavado de manos, el uso de mascarillas o el distanciamiento físico.
DISMINUCIÓN DEL NÚMERO DE CASOS
Cuatro meses después de los primeros casos, el experto haitiano califica de «tranquilizadores» los resultados de la pandemia en Haití, comparándolos con lo que está sucediendo en la vecina República Dominicana, pero se niega a hablar de victoria.
«Hasta ahora no hemos tenido la catástrofe que se predijo», dijo el doctor, aunque advierte de que los buenos datos «no justifican bajar la guardia».
En el país se han registrado 7.412 contagios y 161 muertes, con 34 nuevos casos y dos decesos más en las últimas 24 horas, según los datos del último boletín del Ministerio de Salud.
Basándose en estos buenos datos, el pasado miércoles el Gobierno levantó el estado de emergencia, decretado en marzo, y desde finales de junio inició la reapertura gradual del país.
«Cuatro meses más tarde, vemos que la curva está bajando, aunque hay uno o dos departamentos donde la curva es estable o está subiendo. Eso significa que ya hemos alcanzado la cima», explica.
¿UNA EPIDEMIA QUE BENEFICIA A HAITÍ?
Gracias a esta epidemia, Haití ha aprovechado la oportunidad de fortalecer su sistema de salud, que era probablemente el más frágil de América.
Actualmente hay más de mil camas disponibles y se han incorporado al sistema sanitario ventiladores y otros equipos médicos que antes no había en el país.
«El sistema de salud probablemente ha mejorado como resultado de la pandemia», dice el doctor, aunque duda de que el progreso sea sostenible.
«Nos damos cuenta en el país de que estamos haciendo progresos, pero al mismo tiempo, estamos demostrando nuestra incapacidad para hacer estos progresos sostenibles», puntualiza.