Los casos globales de COVID-19 ascendieron ayer a 38.3 millones, después de que se confirmaran 336,000 nuevos positivos en las últimas 24 horas, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los fallecidos son más de 1,08 millones, 4.200 más que en la jornada anterior.
América concentra casi la mitad de los casos, 18.1 millones, mientras que el sur de Asia suma 8.2 millones y Europa 7.4 millones.
Asia-Pacífico, la región donde se registraron los primeros casos de COVID-19 a finales de 2019 (en la ciudad china de Wuhan) es sin embargo la que menos positivos confirmados tiene, apenas 667,000.
La curva de contagios diarios en Europa se mantiene en fuerte tendencia ascendente, y hoy podría alcanzar un récord de 130,000 nuevas infecciones, más que en América, con unos 100,000 contagios por jornada. En el sur de Asia la curva es claramente descendente, aunque aún supera los 70.000 casos diarios, después de haber alcanzado más de 100.000 en septiembre.
El continente americano se acerca ya a los 600.000 fallecidos en la pandemia, mientras que Europa acaba de superar el cuarto de millón y el sur de Asia los 130.000. Asia-Pacífico, la región con menos muertes, suma algo más de 14.000.
En la gráfica de fallecidos Europa supera ya el millar de muertes diarias, aunque está lejos de las cifras de marzo y abril, cuando alcanzó los 5.000 en algunas jornadas.
EEUU es el país con más positivos confirmados, con 7,7 millones, y le siguen India (7,3 millones), Brasil (5,1 millones) y Rusia (1,3 millones).
ÁFRICA
1.6 millones.
Desde que se detectó el primer contagio continental, el pasado 14 de febrero en Egipto, la región acumula algo más de 1.6 millones de casos (el 4.2 % del total mundial), 39,000 muertes (3.6 % del total mundial) y 1.3 millones de curaciones, según los últimos datos divulgados ayer por CDC África, organismo de la Unión Africana.