LA PAZ.- La interpelación al ministro del Interior, Eduardo del Castillo, sobre la detención de la expresidenta de Bolivia, la conservadora Jeanine Áñez, fue interrumpida el martes a puñetazo limpio en la Asamblea boliviana.
El senador de la oposición, el derechista Henry Montero, del partido Creemos, y el diputado Boris Gabriel Antonio Colque, del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), se enzarzaron en una auténtica pelea que terminó con ambos en el suelo del hemiciclo.
Finalmente, Montero que pidió quien pidió disculpas por tan lamentable espectáculo, abandonó el pleno y lasesión pudo continuar.
Otras dos parlamentarias, Tatiana Áñez de Creemos y María Alanoca del Movimento al Socialismo (MAS), también se tiraron de los pelos, en otra dependencia del Parlamento boliviano.
Una muestra de la tensión política y social que vive el país.
La conservadora, Jeanine Áñez se autoproclamó presidenta interina en noviembre de 2019 tras la dimisión y posterior exilio del entonces presidente, el izquierdista Evo Morales, que buscaba su reelección para un cuarto mandato entre acusaciones de fraude.
Áñez estuvo un año en el poder hasta que el Movimiento al Socialismo (MAS) recuperó la presidencia, con Luis Arce al frente.
La expresidenta Jeanine Áñez se enfrenta a un proceso judicial por presuntos delitos de «sedición, conspiración y terrorismo».
Desde mediados de marzo está en prisión preventiva.
La Organización de Estados Americanos (OEA) ha mostrado su preocupación por el «abuso de los mecanismos judiciales» por parte del partido del Gobierno boliviano.