LIMA, 5 Jul. (EUROPA PRESS) – El Congreso peruano ha convocado para los próximos 7 y 8 de julio sesiones para elegir a nuevos magistrados del Tribunal Constitucional con la intención, según denuncian especialistas y políticos, de cuestionar y hasta bloquear las iniciativas de un posible gobierno de Pedro Castillo.
Hasta seis de los siete integrantes del pleno del Constitucional pueden ser sustituidos porque han superado ya el mandato que les correspondía originalmente, aunque es necesaria una mayoría de dos tercios de la Cámara –87 votos– para cualquier nombramiento. Los favoritos entre los 15 candidatos son juristas con un marcado perfil conservador y considerados afines al aprismo y al fujimorismo.
«Quienes están en un plan B de tentar sacar del poder a (Pedro) Castillo tan pronto les resulte factible, no solo con vacancia sino ensayar una nulidad de elecciones, necesitan un TC que les pueda avalar esto», ha advertido Walter Albán, integrante del consejo directivo de Proética, exministro y ex defensor del Pueblo.
«Necesitan un TC a la medida. Lo aseguran con un concurso plagado de irregularidades. Los finalistas se autodescalifican al continuar en un concurso de esta naturaleza», ha añadido.
Además, habría también un afán de impunidad porque buscarían frenar investigaciones de corrupción de los casos Lava Jato y Cuellos Blancos. «Necesitan un TC que garantice impunidad. También el comportamiento irregular que ha tenido este Congreso puede generar responsabilidades», ha señalado.
Así, los congresistas José Luna, de Podemos, y José Vega, de UPP, encargados de evaluar a los candidatos a magistrados, están involucrados en casos judiciales que pueden llegar al TC.
Perú está a la espera de conocer su próximo presidente, después de la disputada segunda vuelta del pasado 6 de junio, que dejó a Castillo, con el 50,12 por ciento de los votos, por delante de la opción ultra conservadora que representa Fujimori, quien con el 49,87 por ciento de las papeletas ha pedido nulidades de actas.