La Fiscalía de Panamá inició este miércoles una investigación por «posibles actos delictivos» tras la difusión de un video presuntamente relacionado con el juicio por escuchas ilegales que enfrentó el expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014) y en el que absuelto de los cargos en su contra.
La investigación «está encaminada a realizar las diligencias correspondientes para determinar la veracidad o no de los hechos dados a conocer a través de las redes sociales», dijo el Ministerio Público (MP, Fiscalía) en un breve comunicado.
El video, difundido por el medio digital panameño Foco, muestra que Martinelli habría coincidido en un restaurante de la capital con un hombre de nombre Ricardo Ramírez, identificado como el esposo de Marisol Osorio, una de las tres magistradas del juicio que culminó en noviembre pasado y que absolvió al expresidente.
El video del encuentro, en el que también participó Alejandro Pérez, uno de los abogados de Martinelli, y otra persona de nombre Virgilio Crespo, tiene fecha del 31 de octubre pasado.
El medio digital Foco destaca que un día después, el 1 de noviembre, la defensa del expresidente anunció la suspensión de la presentación de pruebas, después de haber exhibido solo 13 de las 40 anunciadas.
«Sabemos que esta investigación ya está en manos de las autoridades de los Estados Unidos, que llevan una investigación por posibles sobornos a jueces panameños con base en la confesión hecha por un participante que justamente está en este video», aseguró Foco.
El pasado 9 de noviembre, un Tribunal absolvió a Martinelli de los delitos de interceptación de telecomunicaciones, y seguimiento, persecución y vigilancia sin autorización judicial, por lo que se exponía a ocho años de cárcel.
Este proceso se llevó a cabo luego de que una corte de Apelaciones anuló el primer juicio por este caso, en el que Martinelli fue declarado «no culpable» y en el que enfrentaba cuatro delitos que sumaban 21 años de prisión.
Martinelli, que siempre ha defendido su inocencia y se declara un perseguido político, se enfrenta en Panamá a un proceso por blanqueo por el caso de los sobornos de Odebrecht, al igual que en otro caso, conocido como «New Business» y vinculado a la compra de un conglomerado de medios.
Sus dos hijos, Luis Enrique y Ricardo Alberto Martinelli Linares, están presos en EE.UU. donde se declararon culpables del blanqueo de 28 millones de dólares vinculados a la trama de Odebrecht.
Ambos hermanos están acusados de participar «en pagos de sobornos hechos por y bajo la dirección de Odebrecht a un funcionario de alto rango en ese entonces del Gobierno de Panamá, que era un pariente cercano de los acusados», cuya identidad no ha sido revelada.