El Consejo de Seguridad de la ONU pospuso la votación de ayer miércoles sobre la extensión de la misión política de la ONU en Haití luego de que China convocara a consultas cerradas sobre la resolución propuesta.
China no tiene relaciones diplomáticas con Haití, que es el país más pobre del hemisferio occidental y está siendo sacudido por un aumento de la violencia relacionada con pandillas, con secuestros y asesinatos en aumento.
El embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyansky, dijo después de la reunión que “todos están muy preocupados y creemos que debemos hacer más”. La pregunta es “qué hacer en términos prácticos”, dijo.
Estados Unidos y México, que están a cargo de la redacción de la resolución, harán algunos cambios al texto.
En octubre de 2021, se llegó a un compromiso de última hora entre China, que solo quería una extensión de seis meses para la misión de la ONU, y muchos otros miembros del consejo que pidieron una presencia a largo plazo en la ONU y buscaron un mandato de un año.
Esa resolución aprobada por unanimidad prorrogó la misión política hasta este viernes. Los diplomáticos dijeron que esperaban votar sobre una nueva resolución ese día.
Cuando se adoptó esa resolución en octubre, Haití había estado lidiando con el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio pasado, un terremoto de magnitud 7,2 que mató a más de 2.200 personas en agosto, y una escalada de asesinatos, secuestros y guerras territoriales relacionados con pandillas.
Un año después del asesinato, la violencia de las pandillas es aún peor y Haití ha entrado en una caída libre que ha visto caer la economía y muchos haitianos huyen del país para escapar de la agitación.
Esta semana, funcionarios de la capital de Haití informaron que decenas de personas habían muerto como resultado de días de enfrentamientos entre bandas rivales en el violento barrio de Cite Soleil. Médicos Sin Fronteras dijo el martes que miles de personas quedaron atrapadas en ese distrito sin agua potable, alimentos y atención médica.
Un gobierno abrumado está luchando para tomar medidas enérgicas contra las pandillas. Al mismo tiempo, los intentos de formar un gobierno de coalición han fracasado y los esfuerzos por celebrar elecciones generales se han estancado, lo que ha dejado a muchos preguntándose hacia dónde se dirige Haití.
La ira de China con Haití se deriva de sus relaciones diplomáticas con Taiwán. Haití es uno de los 13 países que continúan reconociendo a Taiwán democrático y autónomo, que China reclama como parte de su propio territorio.
Las Naciones Unidas han estado involucradas en Haití de forma intermitente desde 1990, y la última misión de mantenimiento de la paz de la ONU estuvo en el país desde 2004 hasta octubre de 2017. La misión política ahora allí asesora al gobierno de Haití sobre “promover y fortalecer la estabilidad política y el buen gobierno”. incluyendo la implementación del estado de derecho, el diálogo nacional inclusivo y la protección y protección de los derechos humanos.
El embajador de México ante la ONU, Juan Ramón De La Fuente Ramírez, dijo a los periodistas antes de la reunión del miércoles que estaba muy preocupado por la situación en Haití. “Es hora de actuar de manera inteligente y efectiva”, dijo.