La desarticulación de Marcha Verde y la tranquilidad que exhiben los gremios crean un ambiente favorable a Medina
El presidente Danilo Medina acudirá a la Asamblea Nacional el próximo miércoles 27 de febrero para la penúltima rendición de cuentas de su segundo mandato en un ambiente matizado por poca o ninguna presión social y con el tema de la inseguridad ciudadana como el gran desafío.
La desarticulación del movimiento Marcha Verde que mantuvo contra la pared al gobierno por más de un año, ha sido un verdadero respiro para la gestión de Medina, que enfrentó uno de los grupos de presión social más fuertes de los últimos años. La última manifestación masiva del grupo fue el 12 de agosto del 2018 con la llamada “marcha del millón”.
Pero además, la presión que recibía el gobierno de gremios como la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), el Colegio Médico Dominicano (CMD) y de varios sindicatos del transporte, ha bajado si se toma en cuenta que hasta octubre del 2018 esas entidades habían abierto varios frentes contra la gestión del presidente Medina.
Los transportistas generaron caos en varias ocasiones en el último cuatrimestre del 2018 en protesta por el alza de los combustibles, pero las rebajas consecutivas en los derivados del petróleo desactivaron ese foco de presión.
Igualmente, la salida de Waldo Ariel Suero del CMD ha bajado los paros en los hospitales. La sorpresa ha sido la ADP que a pesar de estar controlada por la oposición con Xiomara Guante, hasta ahora no le ha generado problemas al gobierno, especialmente con la paralización de las clases.
De hecho, recientemente los panaderos habían amenazado que suspenderían la entrega de panes y galletas del desayuno escolar por la falta de pago, pero esa medida quedó sin efecto.
La política migratoria del gobierno siempre ha sido de los puntos que ha generado críticas al gobierno, pero desde que el Estado rechazó la firma de dos acuerdos sobre migración propuestos por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a final del pasado año, el tema ha salido de la agenda de la opinión pública.
Los logros
La del próximo miércoles, será la séptima rendición de cuentas de Medina y el crecimiento y la estabilidad económica, la política social y la educación se mantienen como los grandes logros de las gestiones del gobernante que en agosto cumplirá siete años corridos de gobierno.
En el 2018, la economía creció 7%, según las cifras del Banco Central y la perspectiva de crecimiento para este año se mantienen igual. La pasada semana el gobierno anunció un aumento del bono escolar y la extensión del programa a 251 mil 237 adolescentes y jóvenes lo que representa un aumento de 106% con relación a los 121 mil 742 que lo recibían en el 2018.
Igualmente, el presidente Medina informó que en los últimos seis años más de un millón y medio de dominicanos han salido de la pobreza y según los datos oficiales la clase media pasó de 22.6% a 30% de la población.
También es de Medina el mayor mérito de que se hayan aprobado las leyes de Partidos Políticos y la del Régimen Electoral, no solo por el peso de la figura presidencial, sino porque su sector político es el que cuenta con la mayoría en el Congreso. De hecho, en su discurso de rendición de cuenta del año pasado instó al Congreso a aprobar esas iniciativas.
Las debilidades, seguridad y salud
A pesar de que el presidente Medina podrá llevar buenas noticias al país de sus ejecutorias como la puesta en marcha del teleférico de Santo Domingo, hay temas como la seguridad ciudadana y la salud en los que el gobierno no ha tenido muchos aciertos.
Al inicio del 2019, el tema de la inseguridad ciudadana estremeció tanto al país que el presidente Medina se vio obligado a abordar el tema con los periodistas. En sus declaraciones responsabilizó a los deportados de los hechos de violencia. El combate al tráfico y microtráfico de drogas, también impactó al país al inicio de este año, especialmente por el asesinato del coronel Daniel Ramos Álvarez, en un punto de drogas en Peravia, Baní. El hecho provocó cambios en la dotación policial de Baní y otros lugares. También renunció el presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), José Eugenio Matos de la Cruz.
El tema de la salud es de las debilidades del gobierno del presidente, pues a pesar de que se ha ampliado la cantidad de personas incluidas en el seguro de salud subsidiado del Seguro Nacional de Salud (Senasa), hay debilidades como la alta mortalidad materna e infantil que no se han podido controlar.
El gobierno tampoco ha podido cumplir con la entrega de 56 hospitales que fueron intervenidos de manera simultánea lo que generó problemas en los servicios de salud por las dificultades para operar. También la reaparición de casos de rabia que generaron al menos dos muertes al final del pasado año.
Expectativas políticas ante rendición cuentas
De cara a la rendición de cuentas alrededor del presidente Medina también se han generado expectativas políticas, sobre todo porque este es el año preelectoral y el gobernante aún no ha decidido si impulsará otro proyecto de reforma para repostularse para las elecciones del 2020. Esa situación le genera un ambiente de presión política especialmente a lo interno de la organización, básicamente por el expresidente Leonel Fernández y sus seguidores que se oponen a otra reforma para beneficiar a Medina. Las declaraciones recientes del ministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta y del ministro de Interior y Policía y miembro del Comité Político, de que Medina es el mejor activo del PLD para ganar en el 2020, ha generado aún más expectativas sobre el tema.