A pesar de que el presidente Luis Abinader eliminó el Despacho de la Primera Dama, Raquel Arbaje, esposa del actual Jefe de Estado, ha aprovechado su posición durante casi seis meses de gobierno para fomentar políticas sociales y canalizar ayudas a decenas de personas necesitadas o marginadas.
La tormenta Laura fue el primer desastre natural de la gestión de Abinader. El fenómeno atmosférico, ocurrido en septiembre de 2020, provocó que Luz Vanessa, madre de tres niños, perdiera sus ajuares a raíz de las inundaciones. Tras visitarla y conocer su situación, la Primera Dama canalizó la entrega de camas, abanicos, nevera, estufa y televisor a la familia.
Durante el mes de octubre se realizaron las jornadas de detección de cáncer de mama “Prevenir es Vivir”, en las que Arbaje prometió brindar seguimiento a cada caso detectado. Según registros periodísticos, impactaron a 1,500 mujeres, de las cuales 255 serán sometidas a exámenes más exhaustivos.
En ese mismo mes, cuando la pareja presidencial se enteró de las condiciones en que quedó Yocairy Amarante, una joven que fue atacada con ácido del diablo por supuestas órdenes de su expareja, ambos se comprometieron a brindar el apoyo necesario para las cirugías reconstructivas.
Para noviembre, presentaron un programa junto al Fondo Especial de Desarrollo Agropecuario (FEDA), en el que las mujeres solteras administran colmados y puntos de comercialización de productos agropecuarios, a la vez que el resto de la comunidad accede a bajo costo. Asimismo, cuentan con préstamos flexibles que irán pagando con lo que van a producir.
El primero de ellos fue inaugurado en Los Alcarrizos.
Hilda Peguero, una anciana de 85 años cuyas dolencias la mantienen postrada en su hogar al cuidado de sus hijos, dejó de recibir la pensión de casi 8,000 pesos que le entregaba el Estado tras 51 años como empleada en el Ministerio de Salud Pública.
Luego de que LISTÍN DIARIO publicara la historia de la señora Guerrero, la Primera Dama de la República se mostró interesada en el caso y expresó que se encargaría personalmente de canalizar la ayuda.
A finales del tercer mes de gestión, una niña llamada Leticia expresó, a través de un video, su deseo de conocer el Palacio Nacional. Por la misma vía, la Primera Dama la invitó al encendido del arbolito navideño del lugar.
En octubre, Arbaje conoció Jesús Manzueta, quien por años ha trabajado en cañaverales y para finales de noviembre le concedió una nueva casa.
Además, junto al Instituto Nacional de la Vivienda (INVI), la Primera Dama entregó cuatro hogares a sendas familias vulnerables residentes en el sector Jaquimeyes de Barahona, el 30 de noviembre.
Entre esas familias estuvo una dama llamada Yesenia, quien le solicitó un mes antes un nuevo techo para sus familiares, quienes vivían en una casa de madera y zinc, con ventanas de cartón.
Con ocasión del Día Internacional de la Discapacidad, el 3 de diciembre la Primera Dama entregó un aporte económico a la Fundación Manos Unidas por el Autismo, dirigida por Odile Villavizar.
A través de las redes sociales, un camarógrafo llamado Alex Villegas, paciente de cáncer, solicitó a la Primera Dama ayuda para su tratamiento y que deseaba que lo visitara al Instituto Nacional del Cáncer Rosa Emilia Sánchez Pérez de Tavares (Incart).
Arbaje acudió a su encuentro y oraron juntos. Pero un día después, Villegas falleció y la familia presidencial se dispuso a la orden.
En una jornada de reforestación realizada en Villa Altagracia, la primera dama se “autoinvitó a un café” en el patio de una campesina. En esa ocasión la señora le externó que quería tener una vivienda en mejores condiciones, además de unos cerditos para poder mantenerse. Posteriormente, se le fue construida una nueva casa y la pocilga para los cerdos.
En víspera de Nochebuena, Arbaje se trasladó hasta el Centro Penitenciario Najayo Mujeres, en San Cristóbal, donde además de conversar y compartir con las internas, les entregó varias computadoras para que puedan tomar clases virtuales.
De acuerdo a una publicación realizada en la cuenta de Twitter de la esposa del primer mandatario, los equipos pertenecían al antiguo Despacho de la Primera Dama. Allí, Arbaje aseguró salir con el compromiso de velar por la reinserción social de estas mujeres.
El Día de los Reyes Magos, Raquel Arbaje destinó bonos navideños a los progenitores de infantes ingresados en la Maternidad de La Altagracia, Hospital Infantil Robert Reid Cabral y el Hospital Infantil Hugo Mendoza.
En enero de 2021, ayudó a Nurys Henry, quien trabajaba como barrendera y recolectora de botellas en la Alcaldía de Los Alcarrizos. Henry, quien hacía otros negocios para aumentar sus ingresos, pudo iniciar un colmado en donde vende frutas y vegetales con el apoyo de FEDA.
A raíz de una publicación realizada en LISTIN DIARIO sobre el deseo de Griselda Ceballos de continuar su tratamiento contra el cáncer de mama y recuperar su salud, Arbaje acudió en su auxilio y canalizó la cobertura de su tratamiento a través del seguro Senasa.
Una de sus más recientes ayudas la realizó el día 1 de febrero, la Primera Dama estuvo en Villa Linda, donde la familia Frías Nivar perdió a dos de sus miembros cuando las lluvias de la tormenta Laura y el desborde de una cañada provocaron el colapso de una pared en su hogar. Allí, Arbaje entregó a Claritza Frías una nueva vivienda.
De acuerdo a Arbaje, cientos de millones de pesos del antiguo Despacho, eliminado por el presidente Abinader, han sido asignados a proyectos sociales y, especialmente, a la ayuda para mujeres solteras o en situación de violencia.
Estas son tan solo algunas de las ayudas que ha destinado la Primera Dama, ya que ha gestionado además el soporte a denuncias realizadas por redes sociales, así como también ha demostrado el apoyo a causas sociales como la prohibición del matrimonio infantil o la defensa de mujeres víctimas de agresión sexual. Además, ha participado de jornadas de reforestación y limpieza de playas.