El consumo de droga en las embarazadas, alcohol, la hookah y el vape o cigarrillo electrónico están entre los factores que inciden para que los nacimientos prematuros aumentaran un 20% en el país el pasado año.
Los efectos de estas sustancias, además de prematuridad, pueden prolongarse y retrasar el desarrollo físico e intelectual en la niñez y adolescencia, según estudios.
Entre los jóvenes lo que parece un juego tiene repercusiones para ellos y las futuras las generaciones que procreen, porque también aumenta la pobreza, por los gastos que implica tener hijos con complicaciones de salud.
De 7,976 nacimientos tempranos, algunos son fortuitos. No obstante, los especialistas del área están preocupados por esas sustancias nocivas que consumen las adolescentes y las jóvenes. Igual que por la falta de chequeos en el embarazo y la malnutrición.
Las estadísticas del Servicio Nacional de Salud (SNS) indican que de 114,580 partos registrados en el país el pasado año, 59,207 fueron de madres de hasta 24 años y de estas 23,258 eran adolescentes, incluidas 859 de menos de 15 años.
“El uso de sustancia durante el embarazo promueve la prematuridad, el bajo peso al nacer y que el embrión no se desarrolle de forma adecuada, cuando la mujer abusa tanto de droga, la hookah o vape”, advirtió Leandra Cordero Oñate, neumóloga pediatra y nutrióloga.
El bebé trae muchas complicaciones al hacer prematuro o de bajo peso, lo que se compromete desarrollo.
En 2022, el 9.04% de los nacidos vivos presentó bajo peso y el 0.3% malformación.
La doctora Cordero Oñate ve en consulta un aumento de la patología intersticial (lesiones en los pulmones), procesos neumónicos y la fibrosis secundaria y lo atribuye al abuso de ese tipo de producto a temprana edad.
“Todos esos hallazgos se ven en los jóvenes, que entienden que al usar hookah o vape no están fumando, eso es lo que ellos entienden y es todo lo contrario” sentenció.
La ley 16-19 prohíbe el uso de hookah en lugares públicos y privados en el país, pero el cigarrillo electrónico no tiene restricciones y es muy usado entre los adolescentes.
Estudios realizados en el hospital Materno Infantil de Los Mina, determinaron que un 73% de madres adolescentes consumió alcohol durante el embarazo y el 21% de sus bebés requirió atención por la condición del Trastorno del Espectro Alcohólico Fetal.
Entre otros factores de prematuridad y riesgos de muertes infantiles están la hipertensión (preeclampsia), la obesidad, diabetes, tener una vida sedentaria, la depresión y la baja escolaridad.
Los hospitales materno-infantiles de República Dominicana están dotados de unidades especializadas en atención a los bebés prematuros y de bajo peso, con los fármacos requeridos y los médicos especializados.
Maternidad
La maternidad La Altagracia es uno de los centros donde más partos se realizan, y solo el pasado año nacieron más de diez mil bebés, de los que 1,941 fueron ingresados a la unidad de neonatales y 899 fueron prematuros, o sea, el 40%.
Katy Rodríguez, directora de la Maternidad, señaló que en los últimos diez años cada día nacen más prematuros y ese centro recibe a muchos pacientes críticos, porque tal vez la madre no se atendió durante el embarazo.
Explicó que cuando la madre acude con regularidad a las consultas, se conocen sus antecedentes y recibe todas las atenciones a tiempo, de manera que se atienden las infecciones y el parto es más exitoso.
Pero hay casos en que las embarazadas llegan de término a la maternidad y presentan complicaciones.
“Ahora tenemos más altos riesgos, las condiciones se están trabajando en todos los ámbitos, tanto obstétrico, a través de la Sociedad de Obstetricia, del Servicio Nacional de Salud para disminuir la morbilidad de las embarazadas, para evitar los nacimientos a destiempo, las infecciones, y por ende la moralidad materna y la neonatal que es la más alta que hay en el país”, explicó la neonatóloga.
Reconoce que a nivel de país falta mucho por hacer, pero se está trabajando y han mejorado las condiciones de los bebés. Ese hospital docente gradúa 15 neonatólogos al año y el personal es altamente calificado.
“Son más los que se salvan que los que se mueren. A lo largo del tiempo ya hay en el país muchos hospitales con unidades para prematuros y cualquier clínica tiene también, y eso es en base de que somos el primer hospital con residencia que saca alrededor de 15 neonatólogos al año”, dijo la experta al detallar todos los servicios especializados y logros alcanzados en ese centro.
El tabaco en el embarazo, un veneno
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), tienen unas advertencias sobre las consecuencias del tabaquismo para la embarazada y el bebé, que van desde la prematuridad hasta la muerte súbita.
Del documento tabaquismo, embarazo y bebé, publicado en su portal, reproducimos estos aspectos: El bebé podría nacer demasiado pequeño, prematuro, incluso después de un embarazo que haya llegado a término. El tabaquismo disminuye el crecimiento del bebé antes de su nacimiento.
El tabaquismo puede dañar los pulmones y el cerebro en desarrollo del bebé, daño que puede perdurar durante la niñez y la adolescencia.
También duplica el riesgo de que la mujer tenga sangrado anormal durante el embarazo y el parto, poniendo la vida de ambos en peligro.
“Fumar aumenta el riesgo de que su bebé tenga defectos de nacimiento, incluidos el labio o el paladar hendidos. Una hendidura es una apertura en el labio o en la parte interior superior de la boca (el paladar) del bebé. Su bebé podría tener problemas para comer de manera adecuada y es probable que tenga que operarse”