Juan Guaidó, presidente interino autoproclamado de Venezuela, anunció a través de su cuenta de Twitter que “ya entró” ayuda humanitaria por frontera con Brasil.
“Anunciamos oficialmente que YA ENTRÓ el primer cargamento de ayuda humanitaria por nuestra frontera con Brasil. ¡Esto es un gran logro, Venezuela! ¡Seguimos! #23FAvalanchaHumanitaria”, dijo Guaidó mientras se reportan disturbios en dos ciudades fronterizas.
Militares venezolanos lanzaron bombas lacrimógenas para dispersar a manifestantes que intentaban llegar al Puente Simón Bolívar, en San Antonio Táchira (este), para exigir la entrada de ayuda humanitaria, constató un equipo de AFP.
Los disturbios ocurrieron en calles de la ciudad, cuando cientos de personas se dirigían al puente, el paso peatonal más importante que une a San Antonio con la ciudad colombiana de Cúcuta, de donde salieron cargamentos de medicinas y alimentos rumbo al puente.
Militares venezolanos dispersaron este sábado con gases lacrimógenos a cientos de manifestantes que exigen el paso de ayuda humanitaria gestionada por el líder opositor Juan Guaidó, en un puente fronterizo con Colombia, cuyo cierre fue ordenado por el gobierno de Nicolás Maduro para bloquearla.
Los disturbios ocurren en el puente Francisco de Paula Santander, que comunica a la localidad venezolana Ureña (Táchira, este) con la ciudad colombiana Cúcuta, donde está el principal centro de acopio de cargamentos de medicinas y alimentos enviados por Estados Unidos.
Los uniformados repelieron la manifestación, luego de que más temprano hubieran dispersado con gases y proyectiles de goma a decenas de pobladores que exigían cruzar el puente para ir a trabajar al lado colombiano, constató un equipo de AFP.
“Ponte del lado correcto de la historia”, rezaba un cartel que llevaba uno de los manifestantes, la gran mayoría vestidos de blanco.
La AFP pudo ver que al menos dos fueron detenidos. Un grupo de manifestantes incendió un autobús que prendió fuego a una vivienda, lo que terminó disolviendo por el momento la manifestación.
Tanto Guaidó como Maduro convocaron a las calles este sábado a sus seguidores en Venezuela. El primero para exigir el ingreso de la ayuda, el segundo para denunciar lo que califica de un intento de “intervención militar”.
– “Es un momento histórico” –
Coordinado desde Cúcuta por Guaidó, la operación intenta hacer entrar la ayuda desde las fronteras con Colombia y Brasil, donde también se presentan algunos disturbios.
Guaidó, reconocido por más de 50 países como presidente interino de Venezuela, ha movilizado a un ejército de voluntarios para que crucen cargamentos de alimentos e insumos médicos donados por Estados Unidos y sus aliados.
La asistencia está del lado colombiano del puente internacional de Tienditas, que desde comienzos de mes está bloqueado con contenedores de camiones y otros obstáculos montados por soldados venezolanos.
Maduro ordenó el viernes además el cierre del puente Santander, el puente Unión y el Simón Bolívar, el paso peatonal binacional más importante, acordonado por la policía colombiana para garantizar la seguridad y apoyar el paso de la ayuda.
“Vine (..) a aportar mi granito de arena, a luchar. Esto es un momento histórico, los militares allá van a ceder. Tengo fe”, dijo Neyerson Cisneros, sicóloga de 29 años, cerca del puente en el lado colombiano.
Según el dirigente, su traslado a Colombia fue posible con la ayuda de efectivos de la Fuerza Armada, pilar de Maduro.
Horas previas al comienzo del operativo humanitario, cuatro efectivos de la guardia venezolana desertaron tras cruzar dos puentes fronterizos con Colombia.
– Movilizaciones –
Guaidó desafiará el bloqueo de la frontera acompañado por los presidentes de Colombia, Iván Duque; de Paraguay, Mario Abdo; de Chile, Sebastián Piñera; el secretario general de la OEA, Luis Almagro, y el representante especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams.
Respaldado por Rusia, Maduro considera el ingreso de la ayuda el punto de partida de una intervención militar de Washington. El presidente estadounidense, Donald Trump, ha dicho que no descarta una acción militar en el país petrolero.
En Cúcuta, cerca de Tienditas, hay unas 600 toneladas de alimentos, kits de aseo e insumos médicos. Otras tantas toneladas de ayuda están en Brasil y Curazao.
El gobierno chavista cerró días atrás la frontera con Brasil, donde en la víspera murieron dos indígenas y 15 resultaron heridos en enfrentamientos con uniformados venezolanos, mientras que la isla caribeña aseguró que no enviará las cargas sin la autorización de Caracas.
“La sociedad está absolutamente movilizada. Más de un millón de voluntarios se registraron para esta hazaña que va a suceder”, aseguró Guaidó en Colombia.
El secretario general de la ONU, António Guterres, urgió en la víspera al gobierno de Maduro a “no usar la fuerza letal contra manifestantes”. En tanto, el secretario general de la OEA aseguró que el mandatario socialista sería un “cobarde” si ataca a personas desarmadas.
– “Venezuela hoy necesita mucho” –
En Colombia, la oposición aspira a entrar la asistencia en camiones conducidos por venezolanos por los puentes que unen al departamento colombiano de Norte de Santander con Venezuela, los mismos que Maduro ordenó cerrar.
Acompañados por la Iglesia católica, los voluntarios convocados por Guaidó los escoltarían para evitar que sean detenidos por las fuerzas estatales.
Invito a mis excompañeros a “que piensen en la familia, porque esa ayuda no es para ellos mismos, es para todos, y el pueblo de Venezuela hoy necesita mucho”, dijo a AFP Peter Hernández, exmilitar venezolano que llegó hace nueve meses a Cúcuta huyendo del desabastecimiento y la hiperinflación.
Por la emergencia, 2,7 millones de personas han salido de Venezuela desde 2015, según la ONU.
Duque cree que “se pueda llevar esa ayuda humanitaria con el apoyo decidido de un torrente de hermanos venezolanos que llegará a la zona de frontera”.
Los países comparten 2.200 kms de zona limítrofe. Además de Táchira la frontera pasa por los estados de Zulia (noroeste), Apure (suroeste) y Amazonas (sur).
Guaidó no descarta utilizar las llamadas trochas, como se conocen los pasos ilegales que pululan en la porosa frontera de 2.200 kilómetros que comparten Colombia y Venezuela. Solo en Cúcuta, la policía afirma que hay 30 cruces irregulares.
En muchos de ellos, además, operan guerrillas, narcotraficantes y bandas contrabandistas.