Marlon Martínez, acusado de la muerte de la adolescente embarazada Emely Peguero, habló ayer por primera vez del caso sucedido en el mes de agosto del pasado año y argumentó que el crimen derivó de un aborto inducido por una pastilla que se bebió la joven.
Al aceptar declarar ante los jueces del Segundo Tribunal Colegiado de la provincia Duarte, Marlon dijo que no supo qué hacer ni a quién llamar cuando la menor comenzó a sangrar en el apartamento de su madre, adonde acudieron después de salir alegadamente a buscar los resultados de una prueba de embarazo.
“No supe qué hacer, a quién llamar… me quedé paralítico”, dijo en un momento que la emoción le ganó, apoyó su cabeza en la mesa y dejó de hablar.
Contó que la falta de madurez y responsabilidad estaba encima de ellos, y por tal razón estaban nerviosos cuando Emely salió embarazada.
“Llegó un momento en el que los dos estábamos bastante nerviosos por lo sucedido, porque somos jóvenes y la falta de madurez y responsabilidad estaba encima de nosotros, y una gran parte del nerviosismo de nosotros podría ser la reacción de su papá (Genaro Peguero)”, manifestó.
Aseguró que Emely le había comentado que no soportaba los malestares que le daban y todos los pensamientos que le pasaban por la mente.
Dijo también que cuando fueron al apartamento Emely tuvo que subir hasta el cuarto piso porque el ascensor estaba averiado y eso le provocó más malestares.
Con este argumento Marlon se adhiere a lo que alega su abogado de que se debió a un aborto que resultó en un homicidio involuntario, y que se le juzgue como tal.
Presentan pruebas
Marlon Martínez pidió ayer perdón a los familiares de la que fue su novia y desligó a su madre del hecho.
Previo a sus declaraciones, el Ministerio Público dio lectura de la acusación contra él y su madre Marlin Martínez, como inicio del juicio de fondo por el asesinato de Emely.
Entre la documentación presentada están el acta de levantamiento del cadáver de la adolescente, su acta de nacimiento, certificación de evidencia provisional, informe del consejo directivo del Centro Médico Nacional, actas de registros de vehículos, entre otros elementos.
La Fiscalía presentó las pruebas documentales y dejó la presentación de las pruebas periciales y los testimonios de los testigos para la próxima audiencia, que sería el jueves 4 de octubre a partir de las diez de la mañana.
Los abogados de la familia de Emely se adhirieron a la acusación presentada por la Fiscalía y solicitaron de manera civil que a los imputados se les imponga una indemnización de 20 millones de pesos y una pena de 30 años para Marlon y 20 para su madre Marlin.
El abogado de Marlon Martínez, Ricardo Reyna, expresó que no hay pruebas de que Marlon le dio un golpe severo en el cráneo a Emely o si fue un aborto, por lo que no está establecida la causa de muerte de la joven.
“Ellos han puesto tipos penales, sin hechos. Debió tratarse de un aborto que dio lugar a un homicidio involuntario”, dijo Reyna.
Ingrid Hidalgo, defensora de Marlin, dijo que los hechos deben ser probados por el Ministerio Público, pues hay teorías en el expediente del caso que no se ajustan con los hechos.
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MARLON PIDE PERDÓN A FAMILIARES EMELY
El receso audidencia: El juicio de fondo fue recesado para el jueves 4 de octubre a las diez de la mañana. La decisión fue tomada por los jueces del Tribunal Colegiado de la provincia Duarte, para que el Ministerio Público continúe con la presentación de las pruebas testimoniales que poseen en contra de los acusados.
La Fiscalía presentó el testimonio escrito de Simón Bolívar Ureña Almánzar (El Boli), involucrado en el caso por ser la persona que manejó el vehículo en cual fue trasladado el cadáver de la adolescente.
El perdón
Marlon Martínez en su testimonio pidió perdón a los familiares de la que fue su novia.
Emely Peguero desapareció el 19 de agosto del 2017 en Cenoví, provincia Duarte, y su cuerpo fue localizado la noche del 31 de agosto. Estaba dentro de una maleta a orillas de la carretera La Guama, en Cayetano Germosén, provincia Espaillat.
