SANTO DOMINGO.- El encargado interino de la Embajada de Estados Unidos, Robert W. Thomas, expresó que “los retos de la corrupción” en la República Dominicana son endémicos”, y para luchar contra ella “hace falta un cambio de cultura”.
Tras resaltar que la corrupción ha tocado “casi todas las agencias gubernamentales del país”, indicó que ese cambio debe ser adicional al esfuerzo de las autoridades y empresas privadas.
Durante una entrevista concedida al periódico Diario Libre, resaltó que Estados Unidos está comprometido en cooperar con el presidente Luis Abinader en su lucha contra la corrupción administrativa y por la reforma policial.
Indicó que en todo país democrático existe este tipo de desafíos y calificó como positivo que la población se mantenga pendiente de todos los casos de corrupción que están saliendo a la luz pública y que exija transparencia.
“Lo que veo es que el pueblo dominicano está hablando y espera transparencia. Y creo que esa es una parte clave en la lucha anticorrupción. No solo este, sino todos los gobiernos tienen que rendir cuentas de su gestión”, enfatizó.
Señaló que además de ayudar económicamente a la República Dominicana, la nación estadounidense colabora con este país de manera técnica, brindando asistencia para ayudar a modificar y fortalecer los procedimientos y procesos administrativos.
Thomas, quien es encargado de negocios de la Embajada de los Estados Unidos, está al frente de esta legación hasta tanto sea designado un nuevo embajador.
“Los inversionistas estadounidenses siempre nos preguntan sobre los riesgos de su inversión y sobre qué tanto pueden contar con que el Gobierno cumpla con sus compromisos; si existe alguna estructura regulatoria estable y cuánto afecta esta corrupción a su capacidad de inversión”, dijo.
Relaciones domínico-chinas
Respecto a las relaciones de República Dominicana y China, Thomas expresó que Estados Unidos entiende que “cada país debe tener su propio ritmo, su propia agenda y encontrar sus propias relaciones”.
Dijo que aunque República Dominicana haga negocios con un régimen autoritario, las naciones no comparten los mismos valores.