La última información a la que tuvo acceso el Listín Diario, con respecto a los avances de entrega del centro de retención vehicular construido en el Distrito Municipal de La Cuaba, en Pedro Brand, aseguraba que serían concluidos los trabajos, y por tanto se daría paso a su inauguración en diciembre de 2023.
Los detalles fueron ofrecidos por Ramón Manuel Torres Imbert, uno de los ingenieros encargados de la obra en ese momento, sin embargo, avanzados los primeros tres meses del año 2024, es cuando empiezan a distinguirse las distintas especificaciones del diseño de las obras.
A simple vista, en el lugar se puede observar a un extenso grupo de hombres, de distintas compañías, según lo dicho por ellos mismos, en las labores de eficientizar un enorme sistema de drenaje pluvial, soldaduras de hierro, movimientos y medición de tierra, pulido de metales y terminación de la construcción de un bloque que, al parecer, respondería al apartado administrativo.
No obstante, lo que prevalece en imagen son los grandes cúmulos de tierra, entre los que sobresale un rectángulo en cuya planicie máquinas pesadas alisan material de asfalto. Hay bloques de concreto, varillas de construcción, tinacos y otros elementos necesarios ubicados en el área en la que, debido a prohibiciones del Ministerio de Vivienda y Edificaciones (Mived), los obreros se niegan a hablar.
Objetivo
Cuando Hugo Beras era director del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), quien se encuentra en una licencia autoimpuesta, se propuso la construcción del nuevo canódromo al que serían llevados los vehículos fiscalizados por la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett).
La idea central, era, y continúa siendo, que el proyecto reemplazará al viejo depósito de vehículos y motocicletas ubicado en la Avenida Monumental, conocido como “Canódromo El Coco”, que en más de una ocasión han referido que se encuentra lleno, e incluso, ya no recibe vehículos y su terreno fue vendido.
Según lo que se ha dicho, para recepción de vehículos en La Cuaba habrían disponibles 112 metros cuadrados, hacia donde serían llevadas miles de unidades de motocicletas, carros y jeepetas que sean abandonadas por los infractores de la Ley de Tránsito u otras personas con asuntos legales sin resolver.
Respecto a los que permanecen en El Coco, Beras había montado en su momento una persecución a los dueños con llamadas y presión a través de los medios de comunicación sobre una supuestamente cercana subasta a la que serían sometidos sus autos, y los que permanecieran, serán convertidos en chatarra, para luego ser vendidos.
El centro, con una inversión de más de 500 millones de pesos, está próximo a la autopista Duarte, La Cuaba, en el municipio Pedro Brand.
Los precursores han señalado que el lugar no funcionará como un “depósito de chatarra”, sino tendrá un edificio administrativo, un taller de mecánica para la Digesett, un edificio para la Policía, para mantenimiento y mecánica, entre otros.