WASHINGTON.- En la Administración del presidente de EEUU, Joe Biden, crece la sensación de que «los próximos meses podrían ser decisivos» en el conflicto ucraniano. Kiev y Moscú podrían avanzar en algún momento hacia un alto al fuego negociado, indica ‘The New York Times’. La situación tiene de fondo el avance de las FFAA rusas en la región de Járkov.
«En algún momento, ambas partes podrían finalmente avanzar mediante negociaciones hacia el alto al fuego similar al que puso fin a las hostilidades activas en Corea en 1953, o simplemente congelar el conflicto», escribe la publicación, que entrevistó a varios funcionarios de EEUU y de países aliados.
El texto precisa que la artillería y los drones proporcionados por EEUU y la OTAN fueron neutralizados por sistemas de guerra electrónica rusos, que «aparecieron tarde en el campo de batalla, pero resultaron sorprendentemente eficaces».
«En 2024, el Ejército ruso tiene una ventaja material y una iniciativa estratégica», admite el medio.
El Ministerio de Defensa de Rusia informó con anterioridad del avance del grupo de tropas Norte en la profundidad de la defensa enemiga. Durante los últimos dos días, los militares rusos se hicieron con el control de una decena de asentamientos en la provincia de Járkov.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, confirmó el 10 de mayo que hay combates encarnizados al norte de la provincia de Járkov, particularmente en la zona de Volchansk.
El Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania calificó de difícil la situación en esta zona y reconoció que las tropas rusas lograron «un éxito táctico».
Este 15 de mayo, las FFAA rusas tomaron bajo control las localidades de Glubókoye y Lukiantsi, ubicadas en la región de Járkov, y la localidad de Rabótino, en la región de Zaporozhie, comunican desde el organismo castrense.